No pueden oírme, pero yo puedo gritar más.

jueves, 31 de enero de 2013

Dos segundos.

Te miro, te veo y no sé qué es cierto,  ¿cómo saber cuál es la parte real y cuál no, si cada vez que te busco te encuentro? A veces apareces sin ser llamado, y otras en cambio tengo que ir a buscarte, porque solo con sentirte no tengo bastante. ¿Y cómo explico esto? Que me llamen loca sabiendo que tengo razón, que estoy en lo cierto. Sal y salgo contigo, si quieres. Y no te dejo que te caigas, pero si me descuido te presto mis alas. Si sales herida yo te curo, y que no me encuentre al carcelero porque pierdo los papeles y me acelero, como si de mí se tratara. ¿Quieres una manta? Te dejo mi cama, y si te molesta mi cuerpo me busco una rama; y cuando amanezca, bajo el sol y te lo entrego, para que tengas un día perfecto. El frío no me toca si te tengo delante, y no quiero manos si no puedo acariciarte. En la noche, mi cuerpo busca el tuyo, y si no te encuentra solloza en silencio, por si no me doy cuenta, te tengo al lado y te despierto. Tu forma de vivir como guía para la felicidad, tu sonrisa como único motivo. Sin leer entre líneas. Que la vida son dos segundos, y cuando te descuidas se acaba todo lo malo, que solo existe cuando no estoy a tu lado. La tristeza se acabó el mismo día que pude volver a abrazarte, mi: ''qué pequeñita eres'', tu intento de besarme. Se me cayó el mundo cuando te fuiste, pero volvió a estar en pie y aunque me ha costado la vida, ahora no quiero vivirla si no es contigo.

Sin contratos, sin papeles; sin condiciones.

martes, 22 de enero de 2013

Ya se acaba lo malo.

Empieza lo bueno.


Nos queda mucho que hacer, no dejaremos de ladrar, nos quedan aún muchos perros a los que maullar. No tenemos más que perder, solo nos queda avanzar.

Qué bien te sienta la tarde.

Han venido picarazas a peinar con su canción el cabello sonrojado y mustio del crepúsculo caído donde mora el desencanto. Todas las horas jadean si el ocaso no se está en tus ojos desangrando y los párpados bostezan y enmudecen como mirlos desolados. Sola queda la cañada y embriagados los infiernos de mi olor, y será fiero el futuro que castigue, que descubra en ceniceros lo que no te dije.
Voy a desligar las tibias de este diábolo sombrío, que hay veces que no se acuerda de que sigo siendo un niño y sé que no habrá sedales cuando te hiera mi ausencia.

Acuérdate del tragasables que tus lunas derritió con su forja miserable. Apiádate de los zarzales que tan huérfanos dejó junto a humeantes panales.

Yo te querré deshecho, te querré en la roca viva, te querré en todos los versos que no quieran tus pupilas; yo te querré en la acequia; te querré en la cumbre fría; te querré cuando el fantasma de tu voz venga a por mí.

viernes, 18 de enero de 2013

Contigo.

Con clavos en la cama, con frío continuo en el cuerpo. Sensación de vacío, de qué hago aquí, acatando unas normas que no quiero, bajo un techo, sí, pero sin ganas de vivir como antes. Algo que yo he elegido. Me faltan tus besos. Tu voz susurrándome cosas que solo tú y yo podemos entender. Esa mirada tuya que ve lo que hay dentro de mí. Un hasta luego; un punto y seguido. No querer levantarse porque hoy no veré tu carita sonriéndome, ni tus manos acariciarán hoy mi cuello, ni tus labios mi piel. LLegar a casa y que todo esté tan en silencio, que no haya alegría. No querer salir de casa porque sé que no te encontraré al doblar una esquina, no salir porque no puedo darte todas las chustas que hay, no agacharse a recoger las chapas. No nada. Echarte de menos día tras día aunque solo haya pasado uno desde que estás allí. Lejos pero tan cerca. Tan cerca que todavía puedo escuchar tu voz, aunque ya no me llames. Tan cerca que me acuesto y me duermo, y sé que volamos por las noches. Tan cerca que noto tu sonrisa cuando voy a por pizza. Tan cerca que no te veo.

Me encanta que me des los buenos días, me encanta que sonrías y que todo esté bien; que tú estés bien. Me encantax. 25 o 1, tú eliges; pero me muero por verte.


''Todo está perfecto, mi amor. No llores, todo está bien''.

Saliva para curarnos mutuamente las heridas

de las espuelas que nos surjan día a día.

jueves, 10 de enero de 2013

Paso de toda la mierda que me rodea.

Hoy soy solo yo hablando por y para mí. Ser un hombre no es ser fuerte, serás hombre cuando seas noble, cuando tengas algo que decir y no te calles; si eres tú mismo no debes temer a nadie

Vive la vida como a ti te de la gana, nunca se sabe lo que pasará mañana.

lunes, 7 de enero de 2013

Estoy hasta la polla de discutir conmigo misma.

Y odio esta mierda. Porque estoy aquí tirada cuando lo que quiero es estar contigo, abrazándote. Porque sé que me amas, porque me miras de la misma forma que te miro yo, y porque te mueres por acariciarme pero cuando lo haces agitas la cabeza y te dices a ti misma que no, y eso es lo que me mata; que quieres hacerlo, pero no lo haces. Y duele. Y se me forman mil dudas, mil nudos en la garganta que cada vez cuesta más deshacer, y no sé qué pensar. Y encima, estas putas nauseas que llevan jodiéndome la vida dos días. Dormir, y cuando me despierte ver el sol entrar por la ventana, eso es lo que quiero.

Porque no sé, quizá sea yo, o quizá tú o la situación, pero te echo de menos cuando no estás, y hoy no estás. Me muero de ganas por pedirte que me ayudes, pero si me ayudas mis alas no crecerán, o al menos no tanto. La oscuridad nunca es más fuerte.


Que me escribas cuando duermo, que me veas sin mirarme, que cuides de mí.
Que te quiero sin pensarlo, que te siento sin quererlo, que ya eres parte de mí.

miércoles, 2 de enero de 2013

No hay cornisa que aguante este atardecer que no podrán arrastrar las alcantarillas.

Ayúdame a encerrar a las rapaces que buscan cagar mi sombrero para blanquear sus cenagosas orillas.


La oscuridad nunca es más fuerte.