No sé vivir con nadie, pero tampoco sola. Cuando todo reviente, cada una seguirá por su camino, para siempre es mucho tiempo y una noche es poco rato. Yo ya no me juego nada.
Es como cuando tú me prometías cosas, que yo no te creía pero seguía teniendo la estúpida esperanza de que ibas a cumplirlas. Tenías razón, tenías todos tus motivos, te entiendo perfectamente respecto a tu forma de ser; no somos tan diferentes. Soy igual que tú e igual que ella, mi forma de ser es una mezcla de ambas. Nunca sé lo que quiero y para una vez que lucho por ello, se joden las cosas. Es ley de vida, no pasa nada; las cosas no solo dependen de mí.
No paro de entrar y salir de la vida de la gente sin pedir permiso. Mañana todo esto pasará factura, cuando se apague la luz y nos quedemos a oscuras los sentimientos y yo, vaya locura.. Que no lo cura todo, pero escribir siempre ayuda ¿no?
Por eso, siempre tengo el corazón a mano y si lo tengo que romper.. Ya tendré tiempo pa' pegarlo.
Que cada verso mío es un océano, sumérgete en el agua de las lágrimas de un náufrago. Yo que caí por la escalera en espiral, hasta el final, sin respirar el humo de cada palabra. Me tragué el orgullo y se atraganta. Claro que se fueron mis sueños por los agujeros de mi nariz. Mi vida parecía feliz.
Le vi mentir, reírse de mí.
Si algún día me hice mayor y olvidé lo que dije, lo que prometí diciendo que siempre tendría 15. Perdóname, perdón por no ser Peter. Devuélveme el amor, sácalo de tu escondite.
Guardo en el bolsillo los sentimientos, se quieren esconder del tiempo, están huyendo. No quieren saber nada más. Acaban doliendo.
Tu obsesión te ata a un tipo de música sin darte cuenta. Hay recuerdos buenos y otros te consumen poco a poco. Se me escapa el alma en forma de lágrimas, llevo tantas cargas encima que ni te imaginas cuántas. Siempre es sinceridad, historias que contar. Conóceme como persona, después, si quieres; habla de mí.
Todos hemos estado en la oscuridad y en la luz, quizás por eso te sientas como yo y yo como tú.
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