No pueden oírme, pero yo puedo gritar más.

miércoles, 22 de febrero de 2012

Quedarse en silencio a veces es pagar el precio de no haber sido capaz de que te entendiera el resto.

El problema soy yo.
El extraño soy yo.




No estoy loca, solo estoy sola porque elegí estar sola y noto que todo lo rompo si lo toco y no por todo lo que pase en mi entorno tengo que caerme rota.



Necesito verte aquí.

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