No pueden oírme, pero yo puedo gritar más.

domingo, 4 de noviembre de 2012

Y le sobra el valor que le falta a mis noches.

Es capaz de nadar en el mar más profundo, igual que un superhéroe de salvar al mundo. Y se juega la vida siempre en causas perdidas. Por dentro es de colores. Ojalá que me despierte y no busque razones. Y poderle decir que he pasado la vida sin saber que la espero.. Si te vas, me quedo en esta calle sin salida, que este bar está cansado ya de despedidas. Y en silencio pregunta aún de cosas más serias. ¿Dónde vamos tan deprisa? Me pregunta su sonrisa. Caminar salga que salga el sol por donde salga el sol. Y llegar hasta tu corazón. He robado, he mentido, y he matado también el tiempo. Y he buscado en lo prohibido. Y es que la realidad que necesito se ha ido detrás de ese culito. Déjate querer, dímelo otra vez. Quédate cerca de mí. Mírame, vuelve a sonreír que si no yo no comprendo nada. 




Y que me pida más...

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